NONO

Nono, se que te llamaban porque es el nombre que repetía tu amigo. Se que nunca leerás este blog, pero acabo de quitarme el mono de cuero y necesito tambien quitarme la angustia de modo que acudo una vez más a mi confesionario particular.

No se muy bien lo que pasó, cuando llegué estabas tirado en el suelo, inconsciente, todo eran nervios, impotencia y rabia. El tipo del coche sólo repetía que te había atropellado y tu compañero que tampoco entendía nada.

Sujetarte la cabeza para que vomites sangre no era la idea que tenía de divertirme para el Sábado... madre mía que impotencia ver que se muere alguien delante de tí y lo único que puedes decir son estupideces del tipo "ánimo chico"...

No se cómo habrá terminado todo, salimos corriendo a avisar a una ambulancia al puesto de urgencias de Cebreros, avisándoles de la gravedad del accidente, cuando nos fuimos habia ya dos coches cuidando de ti y vimos un coche de la Guardia Civil que pogongo que iría al lugar de tu accidente.

Puesta en marcha, de vuelta a casa, un nudo en la garganta y pisando las continuas cada vez que se me iba la cabeza pensando. Por el camino he preguntado a todo el que me cruzaba, incluso me paraba a preguntar a los guardia civiles si sabian algo de tu estado, nadie sabia nada...

No se que más decirte, sólo que me gustaría que hayas salido de ésta, que la vida es una mierda, llena de dolor y de sufrimiento, pero que se nos hace corta, por algo será...

Hasta siempre Nono